La
meditación es una técnica que, al ser correctamente desarrollada y utilizada,
lleva al ser a profundos estados de relajación, que se ha comprobado tienen
fuertes propiedades sanadoras.
Si te dijera que
existe una herramienta capaz de recuperar la salud física, mental y emocional
de todo ser humano, de manera efectiva y permanente, ¿me creerías? Si te dijera
que además te permite aumentar tus niveles de confianza personal, pasión por vivir,
claridad mental, y mejorar tu capacidad para alcanzar tus metas y objetivos,
¿me creerías? Si además te dijera que esta herramienta puede ser desarrollada
por cualquier persona y de manera gratuita e ilimitada, y que todo está
científicamente comprobado, ¿me creerías?
La meditación es una técnica que, al ser correctamente
desarrollada y utilizada, lleva al ser a profundos estados de relajación, que
se ha comprobado tienen fuertes propiedades sanadoras.
¿Cómo es qué esta
herramienta es tan efectiva?
Primero, debemos
saber que todo ser humano tiene el potencial de crear, amar, soñar, crear una
vida deseada. Se ha estudiado muchos casos de cómo la resiliencia, que es una
propiedad que todos podemos desarrollar, permitió a personas cambiar por
completo su estilo de vida; o como la pasión y la claridad de otros crearon
revoluciones sociales que cambiaron la historia del arte, la ciencia, la
tecnología, la religión, la ciencia, la política o la economía.
Ese potencial está
presente en todo ser humano, pero desgraciadamente ocurren experiencias, pensamientos,
emociones, que van menoscabando esta genialidad que todos llevamos dentro,
relegando nuestras acciones de cómo enfrentamos la vida, según el lugar que
cada uno cree que tiene en ella.
Lo que se ha
comprobado es que todo ese estrés que vivimos, producto de miedos, rabia, angustia, ansiedad, celos y cualquier
sentimiento que nos hizo o hace sentir mal, tiene un poderoso efecto sobre
nuestro ser.
Células estresadas
Físicamente, el
estrés vivido se va almacenando y acumulando en lascélulas de nuestro cuerpo, produciendo diferentes grados
de alteración, tanto físicos como mentales y emocionales.
A nivel físico,
produce cambios sobre el funcionamiento del sistema inmunológico, encargado de
mantener la salud del cuerpo, llegando al punto de producir un gran número de
enfermedades. Esto ocurre básicamente porque el estrés acumulado hace que las células del cuerpo se cierren y no reciban los nutrientes
necesarios, no salgan las toxinas de la célula propias de su funcionamiento, y
no se comunique correctamente con otras células importantes. Al llegar a cierto
nivel el estrés acumulado, se produce la enfermedad.
A nivel del cerebro, el estrés hace que fluya menos sangre al lóbulo
frontal, encargado de formar los pensamientos creativos.
Con esto, el individuo es menos efectivo en encontrar nuevas soluciones en su
día a día, reforzando patrones nocivos, lo que produce que se reafirmen las
conexiones neuronales asociadas a enfrentar los desafíos enfocando la atención
en el problema y no en la solución, generando estados de dependencia y
resistencia al cambio, prefiriendo mantenerse en su zona de confort.
A nivel emocional,
puede llegar a producir sentimiento de desgano, pesadez, monotonía, o de estar
constantemente luchando, al punto de estar con ansiedad o angustia, hasta caer
en estados de depresión.
Además, como los
sistemas físico, mental y emocional están interconectados, el estrés, si no es
tratado de manera correcta, genera su propio sistema en que se retroalimenta a
sí mismo.
Para entender esta
interconexión, veamos el ejemplo de cómo se genera la confianza personal, que
es base para atrevernos a enfrentar los constantes cambios necesarios para
alcanzar un mejor nivel de vida. Primero, para que esta sensación se produzca
de manera efectiva, debe existir la conexión neuronal en el cerebro asociada a que vamos a ser capaces de enfrentar
el desafío.
Esto, a su vez,
hace que se active la orden a la glándula suprarrenal, la que debe estar
funcionando correctamente, para que secrete adrenalina y noradrenalina -que son
los químicos encargados de producir la sensación de confianza personal- en la
intensidad correcta.
Si en este proceso
tenemos alguna asociación referida a que las cosas no van a resultar, o la
glándula pituitaria, hipotálamo o glándula suprarrenal no están funcionando de
manera óptima, no se generará correctamente esta emoción, reforzando que no
vamos a ser capaces de lograrlo, produciendo más estrés.
La liberación
Cada una de estas
partes que intervienen en el correcto funcionamiento del sistema inmunológico,
encargado de la salud; el sistema límbico y el endocrino, encargado de la
memoria, la atención, la creatividad y las emociones, en su base, son un
conjunto de células.
Nuestro cuerpo es
una gran comunidad compuesto por 50 trillones decélulas, partícula viva más pequeña que posee el ser
humano.
Toda esta carga
emocional restrictiva que vamos recibiendo desde pequeños se va almacenando en
las células alterando el gran potencial que tiene todo ser humano.
Lo que hace la
correcta meditación es inducir al cerebro a estados de relajación, que se denominan estados
alfa, theta o delta, logrando que por el periodo que estamos en un estado
meditativo, cambiemos nuestro estado anímico a mayor paz y tranquilidad, y por
lo mismo, el entorno de todas las células del cuerpo también se empapa de esta
emoción.
Lo que la ciencia
ha comprobado es que en este estado meditativo correcto, el estrés almacenado
se libera, ya que la célula del cuerpo vuelvo a abrirse a su entorno, recibe
los nutrientes necesarios, se liberan las toxinas de su interior y vuelve a
comunicarse correctamente con otras células.
Esta práctica
prolongada normaliza el correcto funcionamiento del ser a niveles físico,
mental y emocional, producto del hecho que las células vuelven a operar de
manera correcta.
¿Por qué hago
hincapié en la correcta meditación?
Muchas personas en
la actualidad se dedican a meditar y/o hacer yoga, pero no con la intensidad y la
periodicidad adecuadas.
El cerebro, que es lo que uno debe controlar para lograr
una meditación profunda, es un músculo que se debe entrenar. La meditación es
igual que ir al gimnasio; se necesita ir de manera constante y adquirir nuevos
hábitos para obtener resultados. Si lo hacemos una vez a la semana por 2 horas,
y nada en los 6 días restantes, no vamos a obtener los potentes resultados que
esta práctica entrega. Esto, como todo gran cambio, es disciplina y constancia.
Otro error que se
suele cometer es que las personas se dan espacios para meditar pero no llevan
esta práctica a su día a día. Lo que la meditación busca en una primera
instancia es entrenar la mente para que se haga consciente de ella misma, que
sea capaz de advertir cuando estamos bajo la influencia del miedo, la rabia, la
angustia, la ansiedad o cualquier otra emoción restrictiva, ya que esto es lo
que debemos sanar, estos recuerdos restrictivos que se encuentran en nuestra
memoria, en nuestra células.
Esta es la
importancia del hábito de la autoobservación, que es integrar la meditación
para ser conscientes de nosotros mismos, y lograr identificar cuándo las
emociones nos están invadiendo en nuestro día a día, ya que si no somos
conscientes y actuamos a través de ellas, volvemos a alimentar esta emoción,
esos recuerdos, cargando negativamente nuestro ser, menoscabando la forma cómo
enfrentamos la vida.
Estas reacciones
son las que generan todos los males que existen en la sociedad actual, producto
de miedos e inseguridades que la propia vida nos ha dejado,
como huellas, marcas y heridas no sanadas que vamos plasmando en nuestra vida y
sociedad.
Potenciar nuestra
vida
En mi libro El
Hábito de la Autobservación, busco explicar por qué estamos como estamos y cómo
funciona nuestra maquinaría interna, y entrego una serie de ejercicios para
sanar estas heridas y potenciar nuestra vida, ya que todos somos una importante
pieza de esta gran sociedad planetaria, con algo que aportar más allá de solo
tener un buen pasar.
Si la sociedad
incorporara este hábito de autoobservarnos y nos reencontráramos con el gran
amor que llevamos dentro, la vida ya no sería la misma. Habría integración
política, económica, social y cultural, trabajaríamos por una causa unidos en
pos del bienestar de todos y no solo de algunos pocos. Seríamos capaces de
tomar mejores decisiones alineados con nuestros sueños y no desviados por
nuestros miedos.
El motivo de mi
proyecto es el despertar humano, despertar para entender que está en cada uno
de nosotros, en ti, en mí, en cada uno aportar con un grano más, marcar la
diferencia con amor, cultivar valor, creer en los sueños, ser un agente de
integración en cualquier ámbito en que cada uno se desarrolla.
Es atreverse a soñar,
confiar en la vida y en que si actuamos por amor seremos premiados. Esto lo
digo con fundamentos, ya que desde que partí en este camino, mi vida ha sido
una constante aventura de aprendizaje que me ha llevado cada vez a ser más
feliz, a vivir con sentido. Solo se trata de entregar valor, de llegar a las
personas, y de a poco las cosas materiales llegarán.
¿Cuál sería mi
propuesta final?
Medita, medita,
medita…, autoobsérvate. Limpia cada rincón de sombra en tu interior y
obsérvalo, entrégale consciencia, entrégale amor, atrévete a vivir tu sueño y
la vida te entregará cada vez más. ¡Atrévete a despertar!
Ecoportal.net
Revista Somos
http://www.revistasomos.cl/
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