DECAIMIENTO
Fatiga, astenia, carencia de vitalidad, desaliento, pérdida o merma de la energía personal que produce desidia, negligencia, dejadez, descuido…
El origen del decaimiento está en el desarrollo incoherente o deficitario del factor energía (Acción). La carencia de vigor y la sensación de desfallecimiento pueden estar generadas por bloqueos energéticos o por una mala canalización de esa energía.
Síntomas físicos: fatiga intensa, dolor muscular y articular sin causa aparente, debilidad muscular, caminar cansado, pérdida de flexibilidad, dificultad para concentrarse…
A nivel simbólico el factor energía está vinculado al elemento fuego: la imagen por excelencia que representa la energía es una gran bola de fuego o el sol (fuente de energía, calor, vitalidad, luz… que no se halla únicamente fuera de nosotros sino que también podemos activarlo en nuestro interior).
La postura que el yoga propone como antídoto a los devastadores efectos que el decaimiento produce en el cuerpo y en la mente es Bhujangásana, la Cobra.
Simbología de la serpiente (positiva en muchas tradiciones orientales, mientras que en la judeo cristiana tiene un sentido maléfico, representando al demonio):
. En la tradición yóguica, la energía del poder espiritual latente en el ser humano se halla representada bajo la forma de una serpiente enroscada en la base de la columna, Kundalini Shakti, y simboliza la capacidad que éste posee para alcanzar estados más elevados de conciencia.
. Por su capacidad para mudar de piel, es símbolo de renacimiento, de renovación y representa el ciclo de la luz-oscuridad.
Desde la milenaria tradición china se destaca un grupo de puntos en la parte posterior de la cintura, a la altura de los riñones, que conforman el Mar de la Vitalidad. Al ser estimulados se alivia la apatía y se le otorga tono al cuerpo para superar la indolencia. En la parte anterior del cuerpo, a dos dedos por 2 o 3 cm por debajo del ombligo, se halla el vórtice energético central del ser humano: el Mar de la Energía.
A nivel de chakras, estamos trabajando 2º centro energético, Svadhistana, que a nivel físico se corresponde con riñones, vejiga, órganos sexuales, todo el sistema de fluidos corporales…).
VITALIDAD
La principal función del yoga es vitalizar; nos ayuda a crear las condiciones necesarias para subir la energía, para incrementar la cantidad y circulación o distribución del prana en el organismo: aumentar el prana es vitalizar el cuerpo energético.
Tres fuentes de prana: aire limpio (ionizar negativamente el aire), alimentos con vitalidad, luz del sol (nuestro punto de mayor absorción de energía pránica solar es la zona de entre los omóplatos).
Lo vital en el cuerpo tiene que ver con sistema nervioso parasimpático: rige sistema cardiovascular, respiración y digestión. Todo organismo necesita carga y descarga (SNP). Al relajar la energía empieza a funcionar y a dirigirse hacia los lugares donde está encapsulada. Para ello encontrar un ritmo sano en nuestras vidas que incluya tiempo de calidad para descansar, pasear por la naturaleza, bailar, dormir…
Conectar con experiencias de 2º chakra: belleza, sensualidad, capacidad de disfrute, sentido del humor, no darle de comer al mental.
Limpiezas (limpieza de hígado, limpieza de pies con hierbas-verbena, salvia, mejorama- o con sal y vinagre o frotarlos con aloe vera…), ayunos…
Baños vitales: frotarse por la mañana con una toalla mojada en agua fría y escurrida.
Yama y Niyama (la ética para con uno mismo y para con los demás): vida coherente con tu pensar y sentir que se refleja en tu hacer; al cultivar la honestidad acumulamos mucha energía, ya que no hay nada que ocultar porque tengo un sentido de mí de dignidad.
También la vía del servicio, ser sensible a las necesidades de los otros y trabajar para el beneficio de la comunidad, ordena los tres cuerpos (físico-etérico, emocional y mental).
Lo que más nos nutre son los pensamientos, emociones y la palabra (al cambiar la palabra y desde dónde se dice, cambia el ADN).
La enfermedad viene por la pérdida de electrones negativos generando un PH ácido, debido fundamentalmente al estrés y a una mala alimentación, es decir, hábitos que contaminan las aguas de nuestro mar intercelular, aguas que podrían ser transparentes.
Condiciones favorables básicas para una buena salud:
. Alimentación sana y con vitalidad.
. Ejercicio regular y permanente
. Meditación y relajación (bajar el ritmo interno)
. Pasión por aprender cosas nuevas
. Realización personal a través del trabajo, desde la propia vocación
. Relaciones saludables, afectuosas y abiertas
. Tiempo para el disfrute (amigos, viajes, pasear…)
Fuente: http://budismo-valencia.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario